¿Lees cuentos con tu hijo o hija? o ¿Alguna vez te has preguntado cuáles son los beneficios de la lectura de cuentos en la infancia? Los beneficios de la lectura de cuentos en la primera infancia son múltiples y aquí, te invitamos a explorar diversos motivos por los que leer cuentos a niños y niñas es una experiencia enriquecedora. Conoce por qué la lectura de cuentos es más que un pasatiempo; es una herramienta fundamental en el desarrollo infantil.
Uno de los primeros beneficios que es posible identificar es que la lectura en familia promueve aprendizajes en el área del lenguaje. La adquisición de la lectura y escritura comienza con el desarrollo de la oralidad. Cuando niños y niñas exploran libros, descubren palabras y oraciones más extensas, lo que enriquece su vocabulario y estimula sus redes de palabras en el cerebro.
Como los cuentos infantiles ofrecen diversidad de palabras y riqueza en sus significados, amplían el vocabulario. Esta base sólida en el lenguaje es esencial para comprender y utilizar palabras en diferentes contextos. Además, al compartir cuentos y conversar, se fortalece la comprensión oral de niños y niñas, que es la base de su futura comprensión lectora.
La lectura de cuentos se considera una actividad valiosa para el desarrollo de la alfabetización, habilidad necesaria para el proceso de aprender a leer y escribir. Ayuda a niños y niñas a aprender acerca de letras, sonidos y elementos formales de la lectura. De hecho, las primeras experiencias de lectura en casa se asocian con un mayor vocabulario, habilidades preescolares y un mejor rendimiento académico en la enseñanza básica.
Otra de las utilidades que tiene esta práctica es poder aprender sobre otras áreas, ayudando a niños y niñas a imaginar y construir su realidad. A través de la lectura de cuentos obtienen información sobre el mundo que los rodea. Mientras disfrutan de un cuento, están recordando, aprendiendo y ejercitando la memoria sin darse cuenta. Este proceso despierta su interés por el aprendizaje, sembrando la semilla vital para su futuro.
La lectura a temprana edad es la llave maestra que abre la puerta a un mundo de nuevos conocimientos, conduce a la exploración de interesantes temas, e incluso al entendimiento de desafíos matemáticos, entre otros aspectos.
Desarrollar la imaginación y la creatividad es otro de los beneficios de la lectura, porque pueden transportarse a otros lugares, recrear personajes y escenarios en sus mentes. Esta habilidad se convierte en una herramienta crucial para su formación intelectual. Además, cuando intentan dar vida a esas ideas a través del juego o el dibujo, están fortaleciendo su creatividad y habilidades cognitivas.
También es una herramienta que les permite gestionar sus emociones. Las historias presentan personajes enfrentados a situaciones y problemas, lo que los invita a reflexionar sobre la resolución de conflictos y a desarrollar la empatía. Niños y niñas comprenden las emociones, les ponen nombre e identifican sus propias experiencias en ellas. Esta habilidad es esencial para su desarrollo emocional y su capacidad para relacionarse con los demás.
Finalmente, este ejercicio de lectura de cuentos en familia fortalece el vínculo entre el adulto y el niño o niña. Cuando un adulto dedica tiempo de calidad a compartir una lectura con su hijo o hija, demuestra interés y crea un espacio de conexión único lleno de emociones positivas.
Al leer juntos, los adultos descubren que pueden contribuir significativamente a la educación de su hijo o hija, lo que los hace sentirse mejores padres, madres o cuidadores. Transmitir el gusto por la lectura es esencial; niños y niñas deben ver a los adultos interesados en los libros y el mundo letrado, y ser parte de esa experiencia.